Por Nancy Garín (Barcelona)
Este texto escrito a modo de presentación preliminar, busca articular una serie de ejemplos de activación artística, curatorial y de investigación en arte en torno a problemáticas relacionadas con la inmigración y los espacios sociales de debate política en el contexto del Estado Español en los últimos años.
Esta aproximación nace de mi propia experiencia como parte del colectivo Península. Procesos coloniales y prácticas artísticas y curatoriales, un espacio de articulación sobre cuestiones decoloniales nacido el 2012 y donde varios proyectos, que aquí presento, se encuentran y reflexionan desde sus propias prácticas teniendo como eje común intentar articular desde el gesto “descolonizante” y “dialogado” nuevas formas de abordar las relaciones de trabajo colectivo, así como los contenidos y lecturas de sus obras e investigaciones.
Los momentos de crisis económicas y políticas levantan casi de forma natural todo tipo de efectos desestabilizadores y con ello procesos de cuestionamiento y debate, dando espacio a todo tipo de iniciativas y posibilidades desde un punto de vista crítico. Este proceso que expande el pensamiento colectivo y proyecta espacios de producción, creación y debate en todos los campos, incluidos el arte y la producción cultural inmaterial. La crisis económica desatada en España desde el 2008 y la seguidilla de rebotes en todo el sur de Europa, ha llevado a que las configuraciones no solo en cuanto al plano geopolítico y económico, sino social y cultural se vean cuestionadas. Estos cambios drásticos sufridos en las economías también hacen que reaparezcan viejos fantasmas como la discriminación, la xenofobia y el racismo; del mismo modo que las cifras de desplazamientos y flujos migratorios se ven alterados significativamente[1]. Las décadas antecesoras a la crisis constituyeron la consolidación de grandes bloques económicos y la nueva configuración mundial precedida por la “globalización”, y su promesa de “fin de fronteras”. A partir del 2008, bajo el argumento de la crisis, la lógica se revertirá de forma radical, endureciendo las formas de control, las leyes migratorias e incluso forzando disfrazadamente el retorno a sus países de origen de grandes cuotas de extranjeros[2].
La Crisis como posibilidad de repensar la realidad y el arte.
Productos de la crisis numerosas son las iniciativas críticas que comenzaran aparecer en el contexto del Estado Español, llegando a su más clara y colectiva expresión con el 15M[3], espacio que intentara agrupar todos los ejes posibles de debate en un ánimo propositivo y refundacional del régimen en caída. Desde temas económicos y culturales, como debates sobre migración o identidad sexual, educación, trabajo y salud; acapararon las plazas en un devenir colectivo olvidado en los años de alto consumo y estado de bienestar. La plaza se transforma nuevamente en espacio de encuentro y producción de subjetivación colectiva. En los espacios de producción artística y cultural también surgirá la necesidad de rearticularse, debatir, encontrarse; abriéndose nuevos espacios de participación, debate, producción crítica y activación política, tanto de agentes autónomos como institucionales. El año 2012, producto de todo esto al interior del Museo Nacional Reina Sofía (MNRS), se conformó un grupo de debate y reflexión en torno a arte, colonialidad y curaduría en relación a la historia de España y Portugal, sus procesos coloniales y la latencia de sus relaciones de poder en el presente. “Península”, como se decidirá bautizar a esta iniciativa; nace como necesidad de reflexionar sobre esa ficticia imagen o autoimagen conformada en las últimas décadas de la Península Ibérica con respecto a Europa. Esta idea de su “europeización” otorgada a partir de los 90’ con la forzosa entrada a la CEC (Comunidad Económica Europea), se verá afectada de manera radical producto de la crisis. Como señala el primer documento de presentación del colectivo, “Península es un intento de articular un debate profundo del rol de la península ibérica en los procesos coloniales, la visibilización de las representaciones y narraciones desde diversos ámbitos institucionales en el pasado y el presente, así como las respuestas de artistas, comisarios e investigadores, ante algunas de las problemáticas que de estas narraciones se derivan. Entendiendo que los procesos coloniales que se dan en la península ibérica siguen siendo conflictos abiertos con incidencia en el presente”. Pero fundamentalmente son los procesos de “descolonización” o el gesto de “descolonizar” las propias prácticas y formas de elaboración y abordaje de cada área de investigación, lo que potencian este espacio diverso conformado casi 50 investigadorxs de diferentes disciplinas de las ciencias sociales, artistas y curadorxs. Dentro de Península transitan diversos proyectos agrupados en seis subgrupos atravesando lecturas sobre el colonialismo interno presente en los regímenes jurídicos, la imagen como un agente de colonialidad, la musealizición y las estrategias críticas (en torno a 1992), desobediencias y radicalidad sexuales, e Industrias culturales. Señalar que varios de lxs participantes son agentes provenientes de países de América Latina, o de geografías internas del Estado Español con históricas reivindicaciones producto de conflictos de carácter colonial interno (País Vasco, Galicia y Catalunya). Un breve recorrido a modo de introducción, a través de los trabajos de dos participantes, que desde la producción artística y la cura activan este gesto de dislocación que hemos querido llamar “descolonización”.
Descolonizar la Curaduría
El año 1992 será un año fundamental del cambio de paradigma en el devenir del Estado Español. El proceso de transición democrática comenzado con la muerte de Francisco Franco llegará a su punto culmine durante este año, que paradójicamente tendrá un doble estatus celebratorio. Por un lado el ingreso definitivo de España a la Comunidad Económica Europea, convirtiendo a Madrid en la Capital Cultural ese año, lo que trae consigo la promesa de ser España país bisagra entre Europa y América Latina; por otro, los festejos por los 500 años de la conquista de América.[4] 1992, será, pues, ese punto de inflexión del camino del Estado Español a la nueva modernidad, dibujada por los mercados, la postmodernidad y el neoliberalismo. La nueva configuración del capitalismo postfordista, donde la cultura y el arte vivirán un giro fundamental, determinado por la aparición de nuevos centros de arte, una ‘nueva institucionalidad’, agentes locales con cierta autonomía (curadores y productores) y debates identitarios en el marco de la conmemoración del V Centenario de la “Conquista.” Lxs curadorxs Francisco Godoy[5] y Carolina Bustamante, ambxs provenientes de países de América Latina (Chile y Colombia respectivamente); tomarán justamente este punto de quiebre del 92’ como eje para su proyecto “Crítica a la Razón Migrante” que se desarrollará en La Casa Encendida de Madrid[6] y que el próximo año se presentará en la red de Centros Culturales de España. Para ambxs curadorxes, el proyecto nace de una doble pulsión. Por un lado, poner en relevancia una serie de prácticas artísticas que “ponen en cuestión y actúan en relación a la problemática migrante en el territorio español durante los últimos veinte años”[7] y una pulsión personal de su propia relación vital respecto a su condición como sujetos migrantes. Como señala Godoy, “La exposición responde a ese racismo cotidiano que le había dado a mi propia experiencia y que compartía con Carolina. También respondía al conocimiento y experiencia de vida del colonialismo interno que he ido aprendiendo de la mano de la socióloga boliviana Silvia Rivera Cusicanqui desde el 2009”[8]. La muestra hace un recorrido desde un pasado reciente (1992-2000) a activaciones presentes de trabajos dialogadamente expuestos, que accionan críticamente el problema de la inmigración y la xenofobia a partir del 92’ con artistas que han planteado a la inmigración como practica “insurgente”. Para Godoy, esa deriva tiene su razón en la propia experiencia vital, el racismo cotidiano, invisible para él durante muchos años, comienza a hacerse cuerpo en esa “identidad” otorgada desde fuera. Recordando a Fanon, “esa negritud otorgada por el blanco” será en este caso la “identidad” del inmigrante como una entidad única, homogénea[9].
Justamente esa pulsión llevará a lxs curadorxs a romper el esquema habitual del rol curatorial para desplazarse en el ejercicio de “poner el cuerpo” encarnado en sí una de las obras recuperadas para la muestra, “Sudaca Enterprises” de los artistas cubanos Coco Fusco y Juan Pablo Ballester. Este trabajo realizado en el contexto de la feria de ARCO 97’[10], replicaba en un tono irónico el gesto de “venta” de obras de artistas latinoamericanos en dicha feria, mientras inmigrantes latinos dentro del Estado Español eran perseguidos con leyes cada vez más restrictivas. La acción de guerrilla utilizaba la misma “estética” de feria vendiendo camisetas impresas con textos que reflejaban estos contrastes. En el gesto de apropiación de Godoy y Bustamante existe una pulsión por “descolonizarse” en el sentido del desplazamiento en su estatuto de curador, ya no solo seleccionador y aglutinador. Por el contrario, se proponen como sujetos activos y afectados por aquello que se está investigando y llevando a un estatus expositivo.
De la misma manera que los curadores buscan desbordar su campo de acción, la configuración expositiva será desbordada por una serie de acciones, de quienes hacen parte de la muestra. Acciones fuera del espacio expositivo como la realizada por el colectivo Ferrocarril Clandestino, en contra de los Centros de Internamiento de Extranjeros, reutilizando la obra de los artistas Daniela Ortiz y Xose Quiroga, “Homenaje a los Caídos” (2012)1, o la acción de las compañeras del colectivo “Territorio Doméstico”, reapropiándose de las estrategias del arte (la performance), como forma de rearticulación de su lucha[11].
Colonialismo Interno/ Descolonizarse, Desclazarse.
Dentro de quienes participan en el grupo Península desde la práctica artística se encuentra la artista de Daniela Ortiz (Cuzco, 1985), artista peruana residente hace 7 años en España y que centra su trabajo en las políticas migratorias y estructuras de control migratorio, así como conceptos como ciudadanía, Estado Nación e integración. Temas centrales en las cuestiones de colonialismo interno dentro de Península, identificando espacios intermedios de (re)definición jurídica, que tienen lugar a partir de la regulación de las fronteras, los movimientos migratorios y discursos neocoloniales. Como bien señala Ortiz, el desplazamiento producirá en ella y en su trabajo un efecto de “desclazamiento” respecto al propio devenir estético y producción artística[12]. Si bien antes de la llegada a España su trabajo tendrá reflexiones de carácter social, será su propia experiencia frente a los procesos de control migratorio, tras la pérdida parcial de su estado “legal” de residente, lo que la llevara a profundizar y atender en su trabajo tales cuestiones.
Este “desplazamiento/desclazamiento” que hará al trabajo de Ortiz virar en un proceso de descolonización se verá registrado por vez primera en obra “N-T” (2010)[13]. Su experiencia vital como trabajadora en una tienda de chocolates de lujo en el centro de Barcelona (chocolates bañados en oro de 24klt), le harán reflexionar sobre estas formas de subjetivación en la relación trabajo, migración, precariedad y legalidad. Utilizando la fecha 12 de Octubre como contextualización (fecha festiva en España, pero en que ella debe trabajar), nos hablara sobre la condiciones de trabajo contemporáneo, herederas de las construcciones coloniales. La metáfora del chocolate y el oro, ambos elementos traídos a España desde las colonias hace más de 500 años, para mostrar la continuidad de las formas de explotación contemporáneas, serán la materia prima de este trabajo en un gesto de “decolonizador”. El camino desde este primer gesto a los últimos trabajos de Ortiz, ira profundizando en identificar las formas de control y subjetivación, buscando generar espacios de tensión, sobre conceptos como clase, raza, nacionalidad y género, para evidenciar la conducta social basada en la inclusión y la exclusión. Esta radicalidad y profundización en su trabajo tendrá un nuevo registro en “FDTD Sedación forzada para deportar” (2012, duración: 5’55’’), un trabajo de vídeo donde será su propio cuerpo el vehículo comunicante.
La pieza registra a la artista durante el proceso de sedación con el mismo producto utilizado por las autoridades migratorias en el momento de una deportación. Ortiz pondrá en evidencia dos situaciones paradójicamente enfrentadas: las lógicas económicas y el control migratorio. Por un lado las drásticas medidas de control sobre la circulación de los cuerpos (en este caso del gobierno de los Estados Unidos) y por otro las nuevas alianzas económicas con el Tratado de Libre Comercio (TLC), que suponen la “eliminación de fronteras o limitaciones” para los productos entre los países miembros[14].
Ese mismo año realizara en colaboración con Xose Quiroga “Homenaje a los Caídos”, poniendo en cuestionamiento lo motivos de celebración del 12 de Octubre y las condiciones a que el régimen migratorio y de control somete a los extranjeros. Llevando en el recorrido un cartel con la imagen de Samba Martine[15], mujer congoleña muerta por falta de atención en un Centro de Internamiento para Extranjeros, pondrá en tensión el contexto de celebración que vive la población de Madrid en el “Día de la Hispanidad”[16]. Daniela Ortiz comenzará su recorrido justamente en el hospital donde Samba murió y que paradójicamente lleva el nombre de 12 de Octubre. Su recorrido ira dibujando una serie de espacios y símbolos esparcidos por la ciudad que ilustran no solo los rasgos de ese pasado colonial, sino aquellos relacionados con un pasado reciente de violencia institucional. Monumentos, edificios oficiales, avenidas con nombres de conquistadores y esclavistas; servirán como escenario de este recorrido que terminara las afueras del Centro de Internamiento para Extranjeros de Aluche. Interesante es el proceso que esta obra vivirá a posteriori, ya que el cartel con la imagen de Samba será reapropiado por los espacios de activismo en torno al cierre de los CIES (Centros de Internamientos para Extranjeros). El mismo desplazamiento que darán a este trabajo Francisco Godoy y Carolina Bustamante en el contexto de “Critica a la Razón Migrante”. De la misma manera Ortiz se situara en un adentro y afuera permanente respecto de espacios de activismo como los mencionados en colaboración constante y mutua.
Su trabajo en dialogo con espacios de lucha de migrantes y las leyes migratorias será permanente, participando activamente en espacios como Tanquem els CIEs o el Espacio del Inmigrante de Barcelona; o más indirecta con espacios similares en otras provincia del Estado Español. Su participación siempre desde una mirada no paternalista o utilitaria; sino de un mutuo agenciamiento, acompañamiento, de manera colaborativo y dialogada con estos espacios. Esto es lo que ocurrirá con el afiche de “Homenaje a los Caídos”. Retomado como herramienta dentro de los espacios colectivos de lucha, el afiche será reutilizado en varias ocasiones en manifestaciones contra los cierres de los Cies, contra las deportaciones, y otras serie de acciones de estos colectivos y espacios activistas. Los materiales producidos por Ortiz son elaborados en dialogo y cooperación con variados agentes participantes, que como bien señala Ortiz, “son parte de esa red mayor de complicidades y activación conjunta desde el campo del arte, los activismos, etc.[17] . “Yo no trabajo con ‘grupos de inmigrantes’ si no con colegas, amigos con quienes nos vamos encontrando y trabajando juntos en estas y otras cuestiones“[18]. La experiencia del proceso continúo de “descolonización” de las formas de producción, a través de procesos dialogados, colectivos; que se generan internamente en Península y también en la relación establecida con otros espacios de producción y enunciación (estudiantes, educadores, activistas, etc), es lo que trabajos como los presentados y todos los trabajos que realizamos quienes hacemos parte de este grupo, consideramos como centralidad de nuestra práctica nace y se potencia desde la deconstrucción de nuestras prácticas, nuestros discursos y nuestra mirada del mundo.
[1] Datos señalan el auge de flujo migratorio habría ocurrido entre los años 2000 y 2007, producto del boom de áreas como la construcción que requería de mano de obra barata. El 2010, producto del inicio de la crisis y el fin de “burbuja inmobiliaria”, el proceso se revertirá drásticamente. [2] El Estado Español realizara una “campaña de retorno voluntario” durante el año 2008, que buscaba incentivar a los inmigrantes no comunitarios en paro a que regresaran a sus países de origen. http://elpais.com/diario/2009/07/25/internacional/1248472808_850215.html [3] El 15M fue un intenso movimiento ciudadano como resultado o respuesta a la creciente crisis económica, política y social que el Estado Español experimentara a partir del 2008. El 15 de Mayo del 2011, tras la llamada de Huelga General, convocada desde diferentes sectores sociales, un numeroso grupo decidirá acampar de forma espontánea en la Plaza del Sol, centro neurálgico de la Madrid. Este gesto se replicara en diferentes ciudades, como Barcelona… La plaza será la metáfora de una democracia participativa, como alternativa al está imperante. Las asambleas emergidas del 15M, darán vida a nuevas formas de organización horizontalistas, colectivas y de redes, que dan vida al actual movimiento social en el Estado Español. [4] Como antecedente a sumar, será solo en este año cuando el Estado reconocerá oficialmente el primer caso de homicidio por xenofobia. [5] Francisco Godoy es escritor, investigador en arte y curador. Es miembro fundador de Península y dentro del mismo hace parte del subgrupo de “La memoria de lo colonial. Musealización, exposiciones y estrategias críticas (en torno a 1992)” al igual que la autora de este articulo. [6] La muestra hizo parte de la convocatoria de proyectos expositivos “Inéditos” de la Fundación Caja Madrid, 2014 [7] Bustamente, Carolina y Francisco Godoy. “Crítica a la Razón Migrante”. Madrid. La Casa Encendida, 2014 [8] Silvia Rivera Cusicanqui es una socióloga, activista, historiadora y teórica aimara. Ha trabajado el concepto de “Colonialismo Interno”. [9] Entrevista/conversación con la autora realizada en el mes de Septiembre del 2014. [10] Para la versión de Arco 97´ el “país invitado” será “Latinoamérica”, en un gesto “colonial” de quienes piensan y organizan el evento. [11] Territorio Doméstico es un colectivo que nace del taller realizado colaborativamente entre SEDOC (Servicio Doméstico Activo), Cita de Mujeres de Lavapiés, Agencia de Asuntos Precarios y lxs artistas alemanes Konstanze Schmitt y Stephan Dillemuth, en el contexto de la exposición “Principio Potosí”. Siekman, Creischer y Hinderer. Museo Nacional Reina Sofía, 2010 [12] Entrevista/conversación con la autora realizada en el mes de Septiembre del 2014. [13] http://www.daniela-ortiz.com/index.php?/projects/n-t-cast/ [14] En la acción Ortiz irá leyendo parte del nuevo Tratado de Libre Comercio entre los EE.UU y Perú mientras es inyectada para ser sedada, al igual que las personas deportadas por el gobierno de EE.UU. http://daniela-ortiz.com/index.php?/projects/fdtd/ [15] Samba Martine estuvo detenida 38 días en el Centro de Internamiento de Aluche esperando su deportación luego de su detención en Melilla. La investigación sobre su muerte fue cerrada sin resultado. http://es.wikipedia.org/wiki/Samba_Martine [16] El 12 de Octubre, día en que Colón habría llegado a tierra, es celebrado como el “Día de la Hispanidad” o Día Nacional de España, siendo esta una evidente reafirmación colonial. En algunos países de América Latina aún se denomina Día de la Raza. [17] Su último trabajo, Estado Nación II” Ortiz propone un análisis crítico de las estructuras de control migratorio mediante la elaboración de un manual para superar el test de integración requerido a las personas migrantes que intentan obtener la nacionalidad española. El proyecto presenta también un test dirigido a los visitantes de la exposición así como el registro de una clase de castellano en donde una persona migrante aprende a pronunciar correctamente el idioma en base a diversos discursos sobre inmigración de políticos españoles”. Texto para la muestra “Un Saber realmente Útil”, Museo Nacional Reina Sofía, Octubre del 2014. [18] Entrevista/conversación con la autora en Septiembre del 2014.